El aire cambia el color de las hojas, nuestro ritmo se vuelve más apaciguado, sin prisa pero sin pausa, el sol disminuye su fuerza y hay que empezar a recuperar el “calor interno”.
Todo en y alrededor nuestro se prepara para acompañar este momento de cambio.
Se siente la invitación que nos hace nuestra madre tierra de liberarnos para empezar a llevar nuestra atención hacia dentro y desde allí contemplar el ciclo que termina. Tiempo de aquietar para recapitular, observar lo que hayamos experimentado sin cuestionamientos ni juicios y así naturalmente desprender….soltar…..renovar
La natural belleza que viste todo a nuestro alrededor nos recuerda que no se trata tanto de adquirir sino de despojarnos, para llegar a nuestra esencia luminosa y armónica.
“Tierra, Gaia, Pachamama evolucionas y contigo quien lo desee.”
Principio y fin de las cosas, avancemos libres por la vida y dejemos ir.
Todo está lleno de oportunidades la tierra, el cielo, las galaxias……Y así la vida!
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